La electrocloración del agua de mar es un proceso que utiliza una corriente eléctrica para convertir el agua de mar en un poderoso desinfectante llamado hipoclorito de sodio. Este desinfectante se usa comúnmente en aplicaciones marinas para tratar el agua de mar antes de que ingrese a los tanques de lastre, sistemas de enfriamiento y otros equipos de un barco. Durante la electrocloración, el agua de mar se bombea a través de una celda electrolítica que contiene electrodos hechos de titanio u otros materiales no corrosivos. Cuando se aplica una corriente continua a estos electrodos, se provoca una reacción que convierte la sal y el agua de mar en hipoclorito de sodio y otros subproductos. El hipoclorito de sodio es un agente oxidante fuerte que es eficaz para matar bacterias, virus y otros organismos que pueden contaminar el lastre o los sistemas de refrigeración de un barco. También se utiliza para desinfectar el agua de mar antes de verterla de nuevo al océano. La electrocloración de agua de mar es más eficiente y requiere menos mantenimiento que los tratamientos químicos tradicionales. Tampoco produce subproductos nocivos, lo que evita la necesidad de transportar y almacenar productos químicos peligrosos a bordo.
En general, la electrocloración del agua de mar es una herramienta importante para mantener los sistemas marinos limpios y seguros y proteger el medio ambiente de contaminantes nocivos.
Hora de publicación: 05-mayo-2023